Hoy en Lengua leímos un texto que nos explicaba varios juegos tradicionales a los que jugaban los niños y niñas de África.
Uno de ellos era la Mamba (es un tipo de serpiente muy peligrosa), que consiste en que un niño/a intenta coger a los compañeros sin salir de un espacio determinado y cada vez que capte a uno se unirá de la mano, pero sin poder pillar. De este modo, cada vez que alguien sea atrapado formará parte del cuerpo de la serpiente que poco a poco ocupará más espacio y será más difícil librarse. Gana quien sea capaz de quedar el último sin ser pillado.
Con esta actividad nos dimos cuenta de que a pesar de pertenecer a continentes, países o culturas totalmente diferentes, tenemos algunas cosas en común, como en este caso los juegos de nuestra infancia. ¿Os disteis cuenta de lo parecido que era este juego a nuestro juego de la Araña?
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